Cartografía urbana de Andalucía: Málaga 1892
A fines del siglo XIX Málaga trataba de recuperarse de la gran catástrofe originada por una plaga de filoxera, que comenzó a asolar las vides de la provincia a partir del año 1877. Desde su conquista por los Reyes Católicos, el vino y las pasas fueron hasta entonces el principal recurso de la provincia junto con los productos hortofrutícolas.
Este Plano de Málaga de los últimos años del Ochocientos retrata una ciudad que intentaba restablecerse de aquella durísima crisis. Gran parte de la población vivía en una generalizada miseria, y la única alternativa posible para frenar el altísimo paro fue construir nuevos edificios y acometer importantes obras públicas.
Plano de Málaga
Emilio de la Cerda Gariot, Joaquín Pérez de Rozas. Málaga,
Tip. y Lit. de R. Párraga, 1892.
Litografía color, 79 x 54,5 cm. Escala 1:5.000.
España. Ministerio de Defensa. Archivo General Militar de Segovia, Carpeta 48, Plano 478.
https://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/prodCartografia/cartoteca/galeria/malaga1892.htm
Andalucía, la imagen cartográfica: obispado de Málaga 1782
Mapa de ingenuo y esquemático trazado que representa el territorio del antiguo obispado de Málaga con indicación de los límites de sus vicarías, debido al doctor canónigo de su catedral Cristóbal de Medina Conde, prolífico autor de obras de contenido erudito y religioso sobre temas de su ciudad y el reino granadino, así como notorio partícipe en las supercherías y falsificaciones que en el siglo XVIII circularon sobre los orígenes de Granada.
El mapa se halla inserto en el manuscrito Antigüedades y Edificios suntuosos de la Ciudad y Obispado de Málaga: obra sucinta que ordenó para responder a las preguntas de un sabio viagero el Dr. D. Cristóbal de Medina Conde…, que el clérigo ilustró con varios grabados del británico Francis Carter y con dibujos de su mano, como este mapa. Al contemplar esta pieza cartográfica realizada pocas décadas antes de que empezasen a elaborarse los nuevos proyectos de división provincial, salta a la vista la estrecha continuidad que mantendrían en Andalucía las demarcaciones adoptadas posteriormente con respecto a los ámbitos episcopales ya existentes. De hecho, la provincia de Málaga sería muy parecida a su obispado.
Cristóbal de Medina Conde y Herrera
Obispado de Málaga, 1782
Mapa, 27 x 41 cm. Escala [ca. 1:440.000].
Biblioteca Nacional de España (Madrid)
https://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/cartoteca/buscar/getetiqueta/id/20377
Detalle del mapa en torno a Málaga capital
Andalucía, la imagen cartográfica: las provincias andaluzas
Desde la década de 1840 hasta fines del XIX se asiste al triunfo indiscutible de la provincia como marco geográfico de representación preferente en la cartografía de Andalucía, fenómeno que resulta paralelo al agudo descenso de las imágenes de conjunto o de amplias fracciones de la región. Tras consolidarse la división provincial de 1833, puede decirse que la provincia y la nación se erigieron en los dos polos básicos de la producción cartográfica sobre España de cierto alcance espacial, en detrimento de los mapas dedicados a los ámbitos más o menos regionales.
Los primeros mapas que surgen de las actuales provincias andaluzas son obras aisladas de factura local y documentos manuscritos de oficiales del ejército. No fue hasta 1846-1847 cuando por fin se editó una serie cartográfica de todas las provincias españolas, impresa en Barcelona con grabados de Ramón Alabern y E. Mabón, inaugurando una línea editorial llamada a tener gran éxito. Distribuida por entregas, según era corriente para toda clase de publicaciones en el siglo XIX, y agrupada en ediciones sucesivas hasta 1854 bajo diversas denominaciones – Atlas geográfico, histórico y estadístico de España y sus posesiones de Ultramar, Atlas que contiene 38 mapas de provincias de España…-, esta colección pionera incluyó cinco láminas con la representación de las ocho provincias de Andalucía, cuya identidad regional quedaba de algún modo reconocida al insertarse en sus títulos el subrayado «Parte de Andalucía». La originalidad de las estampas de Alabern y Mabón estriba más en su fórmula de presentación que en su contenido geográfico, pues no pasan de ser simples versiones por fragmentos del mapa de Andalucía de A. H. Dufour de 1837, aunque introduzcan, eso sí, varias correcciones y reajustes de detalle. Es de notar, por ejemplo, que en Córdoba se rectifica el límite septentrional, mientras que la lámina de Cádiz incorpora un recuadro con Ceuta, ciudad adscrita a dicha provincia desde 1833 hasta 1925.
Ramón Alabern, E. Mabón
Barcelona, 1847
Provincias de Sevilla y Huelva…
Grabado, 28 x 41 cm.
Escala [ca. 1:585.000].
Biblioteca de Andalucía (Granada).
MD 6-13.
https://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/cartoteca/buscar/getetiqueta/id/19984
Andalucía, la imagen cartográfica: España geográfica histórica ilustrada, Málaga
Entre las series de mapas provinciales de la segunda mitad del siglo XIX sobresale la colección de láminas del editor Francisco Boronat y Satorre, tanto por su lujosa e infrecuente estampación en cromolitografía, con unas reproducciones en color de notable calidad y atractivo, como por la novedad de su planteamiento. Además de presentar cada mapa acompañado de datos geográficos y estadísticos, al igual que otras series de la época, les añadió una reseña histórica y el "escudo de armas, tipos, trajes, vista general de la capital y principales monumentos", articulando unas llamativas y elaboradas cabeceras con motivos alegóricos y dedicatorias a personalidades ilustres vinculadas a cada provincia. Tal como ha afirmado C. Montaner, mediante estos recursos Boronat trascendió la mera descripción geográfica y contribuyó a resaltar la identidad de la provincia en sentido amplio, al atribuirle una iconografía, una historia, unas tradiciones y un patrimonio individualizados y característicos.
Considerada la "primera de su género", esta colección de "grandes cuadros", "redactada por una sociedad de escritores, e ilustrada por distinguidos artistas", se publicó por entregas entre 1874 y 1877 bajo el título de España geográfica histórica ilustrada, volviéndose a estampar en 1879 agrupada como Atlas Geográfico Histórico de las Provincias de España. Respecto al contenido cartográfico de las láminas, muestran un apreciable grado de corrección, inspirándose quizás en los materiales que editaba el recién creado Instituto Geográfico y Estadístico. En las representaciones de las ocho provincias andaluzas que incluyó la obra se distinguen ríos, relieves suavemente definidos mediante sombreado, los límites de los partidos judiciales, las poblaciones jerarquizadas según su categoría administrativa, carreteras, caminos y ferrocarriles terminados y en construcción, faros y otros elementos, recurriéndose a las variaciones de color que facilitaba la cromolitografía para componer unas imágenes de gran nitidez y efectividad.
Provincia de Málaga
El mapa de la provincia de Málaga está dedicado al Marqués de Larios.
[F. Boronat], J. Reinoso
Madrid, 1874-1877
Málaga
Cromolitografía, 18 x 24 cm.
Escala [ca. 1:745.000].
Biblioteca Nacional de España (Madrid).
Mv/8.
Concluida la exposición «Andalucía la imagen cartográfica. Málaga. Puerto, Industria, Turismo»
El pasado 24 de noviembre finalizó la exposición "Andalucía la imagen cartográfica. Málaga. Puerto, Industria, Turismo", inaugurada el día 21 de octubre y que ha estado expuesta en la sala de exposiciones de la sede malagueña de la Universidad Internacional de Andalucía.
La exposición celebrada en la capital malagueña ha ofrecido una panorámica de los mapas dedicados a Andalucía desde los principios de la cartografía a la actualidad. En una sección dedicada a Málaga se ha seleccionado un conjunto de representaciones sobre la ciudad en su vertiente urbana y territorial, destacando las tres facetas decisivas de su evolución: Málaga como nudo marítimo puerto y puerta del occidente mediterráneo, ciudad pionera de la industria española y sede de una poderosa implantación del fenómeno turístico. Puede acceder al catálogo de la exposición.
Cartografía histórica de Málaga en la exposición «Andalucía, la imagen cartográfica»
La sede del campus de la Universidad Internacional de Andalucía en Málaga acoge, del 21 de octubre al 24 de noviembre, la exposición Andalucía, la imagen cartográfica. Málaga. Puerto, industria, turismo. Una panorámica de los mapas dedicados a Andalucía desde los principios de la cartografía a la actualidad, junto con una aproximación a las representaciones cartográficas de Málaga y su entorno, bajo la referencia de tres facetas decisivas de su evolución: la actividad portuaria, la industrial y la turística.
La inauguración tuvo lugar el pasado dia 21 de octubre con la presencia del Vicerrector del Campus de Málaga de la UNIA, la Directora del Centro de Estudios Andaluces y el Director del Instituto de Estadística de Andalucía, asi como autoridades locales: Delegado Territorial de Economía y el Alcalde de Málaga.
Exposición «Andalucía, la imagen cartográfica. Málaga. Puerto, Industria, Turismo»
La sede del Campus de Málaga de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) en Málaga acogerá la exposición "Andalucía, la imagen cartográfica. Málaga. Puerto, Industria. Turismo", una muestra que ofrece una panorámica de los mapas dedicados a Andalucía desde los principios de la cartografía a la actualidad, junto con una aproximación a las representaciones cartográficas de Málaga y su entorno, bajo la referencia de tres facetas decisivas de su evolución.
Este doble enfoque permite apreciar, por un lado, la paulatina formación de la imagen cartográfica del conjunto de Andalucía al compás de los avances científico-técnicos y, por otro, contemplar su aplicación en el caso de Málaga, en sus vertientes urbana, sobre todo, y territorial.
La Costa del Sol en los albores de su desarrollo turístico: el vuelo de ESBOGA de 1963-64
Probablemente ninguna otra parte del territorio de Andalucía ha sufrido modificaciones de sus funciones y posición territorial del calibre de las que ha sido protagonista el litoral mediterráneo en la segunda mitad del siglo XX, y concretamente en la Costa del Sol. Ya en el siglo XIX este litoral malagueño cobró un importante protagonismo durante la revolución industrial con la instalación de las primeras fundiciones, que lo convierten brevemente en pionero a escala nacional, a lo que siguió el impulso de las industrias azucarera y textil. Aunque comparativamente las transformaciones de mayor alcance se producirán en la segunda mitad del siglo XX cuando el desarrollo turístico convierten a la Costa del Sol en un destino turístico internacional.
Publicadas nuevas hojas de la Base Cartográfica de Andalucía: Costa malagueña
El pasado 4 de abril se publicaron nuevas hojas de la Base Cartográfica de Andalucía (BCA) a escala 1:10.000. De esta forma se continúa trabajando en la realización de la BCA de Andalucía, teniendo hasta la fecha realizado y difundido más del 57% del territorio.
Esta nueva actualización ha completado fundamentalmente la costa malagueña.
San Luis de Sabinillas (Manilva): de colonia agrícola azucarera y asentamiento pesquero a población turística de la Costa del Sol Occidental
La costa comprendida entre Estepona y Algeciras ha sido históricamente un territorio relativamente despoblado. La desembocadura del rio Guadiaro en la frontera entre los reinos nazarí y castellano condicionó que fuese un espacio en disputa deshabitado. A partir del siglo XVI, la amenaza turca y de los piratas berberiscos obligó a establecer un sistema defensivo de torres-atalayas conectadas con las principales poblaciones próximas: Casares, Estepona y Gibraltar, sedes de las guarniciones y refugio de los habitantes que explotaban los recursos primarios existentes.
La colonización económica de este territorio no se culmina hasta finales del siglo XIX, cuando la familia Larios, una de las dinastías que mayor impronta ha dejado en el territorio y que modernizó el tejido económico andaluz, compra tierras en la costa de Manilva. Aprovecha la preexistencia de trapiches e ingenios azucareros y de cultivos de caña de azúcar pertenecientes al Duque de Arcos, e implanta una moderna industria: el Ingenio de San Luis de Sabinillas, la colonia-factoría azucarera más occidental de cuantas existieron en el litoral mediterráneo. La crisis del cultivo en el primer tercio del siglo XX por la desigual competencia con el azúcar de remolacha, obligó al cierre del complejo industrial. La actividad pesquera se convirtió entonces en el principal medio de vida, visible con la consolidación de dos pequeños núcleos muy próximos, San Luis de Sabinillas y El Castillo, situados sobre la playa y poblados por pescadores artesanales.
La posición de este tramo litoral, en el extremo occidental de la Costa del Sol, condicionó que su desarrollo turístico llegase con retraso respecto a otras poblaciones del litoral malagueño. La construcción del puerto deportivo y el campo de golf de la Duquesa a partir de 1977 fueron los hitos que facilitaron el despegue de la nueva vocación turística. Curiosamente el mayor crecimiento demográfico de este núcleo no ocurrirá hasta inicios del nuevo milenio, cuando Manilva fue uno de los municipios de mayor crecimiento demográfico interanuales de Andalucía, gracias al desarrollo de importantes proyectos inmobiliarios que consolidaron un importante sector de la construcción. La crisis económica y el pinchazo de la burbuja inmobiliaria ha tenido una importante trascendencia local.