IECA / Junta de Andalucía

El territorio es una superficie muy heterogénea donde los fenómenos no se producen con la misma intensidad en todos los lugares. La información estadística suele homogeneizar los datos a extensiones más o menos amplias según el grado de desagregación. Desde hace unos años, el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA) está realizando un gran esfuerzo por ofrecer información para una unidad territorial homogénea y de tamaño reducido, concretamente para celdas de 250 m de lado, siguiendo además la metodología establecida por Eurostat. Los resultados de esta información en estas celdas nos hablan con mayor precisión de lo que ocurre en aquellos territorios donde el fenómeno bajo estudio está presente.

El IECA publica la Caracterización y distribución del espacio construido en Andalucía. Recintos no residenciales, a partir de datos del Catastro inmobiliario actualizado con fecha de diciembre de 2019.

Este nuevo producto sucede a los publicados en el mes de marzo pasado relativo a las viviendas y en el mes de agosto con datos sobre los edificios existentes en Andalucía. Se ofrece ahora un amplio abanico de información relativa a los recintos no residenciales localizados en cada celda de 250 m x 250 m, tales como el número total de recintos, la superficie de los mismos, su tamaño medio, destino de los recintos no residenciales o la superficie destinada a distintos usos dentro de cada celda.

Esta información es posible gracias a la accesibilidad y reutilización de datos públicos, en concreto datos procedentes de una fuente de información muy completa, detallada y precisa, como es el Catastro inmobiliario en suelo de naturaleza urbana y en suelo de naturaleza rústica. El Catastro recopila, para la totalidad del territorio andaluz, información de todos los bienes inmuebles y de aquellos elementos que aportan información de las características específicas de estos bienes.

Esta publicación se enmarca dentro del proyecto de estadística experimental de Caracterización y distribución del espacio construido en Andalucía, con el objetivo de representar con mayor precisión la localización de los recintos no residenciales en el territorio. Se ha trabajado en un proceso de asignación a cada parcela catastral de uno o varios puntos coincidentes con el punto de acceso desde el espacio público a los edificios. Además, a estos puntos se ha asociado toda la información elaborada por la Dirección General del Catastro, referente a las características pormenorizadas de todos los bienes inmuebles. Se han identificado y analizado también todas las construcciones contenidas en cada bien inmueble, con el objetivo de identificar a partir de la información catastral disponible, los recintos no residenciales existentes en el territorio andaluz.

Se entiende como recinto no residencial aquel espacio estructuralmente separado e independiente que no está exclusivamente dedicado a vivienda familiar o colectiva y en el que se llevan o se pueden llevar a cabo actividades productivas dependientes de una o varias empresas o instituciones¹.

De este modo, en Andalucía se identifican cerca de 1,4 millones de recintos no residenciales, de los cuales 693.531 registran alguno de los siguientes usos específicos: industrial, comercial, oficina, hostelería, alojamiento hotelero, deportivo, cultural, espectáculos, religioso o agrícola.

El resto de los recintos no residenciales se agrupa bajo el epígrafe de otros usos que está compuesto por una amalgama amplia de usos, donde destacan los almacenes y aparcamientos en bienes inmuebles no residenciales, depósitos de líquidos, hospitales, residencias y otros usos residuales.

Entre los recintos con usos específicos, los que cuentan con uso comercial destacan por su número, casi 300 mil, lo que supone un 42,9%, aunque no es el uso que suma más superficie, al tratarse de recintos con algo más de 125 m² de superficie media, sumando algo más de 38 millones de m², lo que supone el 17,0% del total de la superficie construida en recintos no residenciales con usos específicos. Los usos con presencia reducida en cuanto al número de recintos, pero elevada en cuanto a la superficie, son fundamentalmente el uso industrial y el deportivo. En el primer caso son algo más de 67.000 recintos en Andalucía (9,7%), con más de 41 millones de m², lo que supone el 18,3% del total. Los recintos no residenciales con uso deportivo suponen el 3,2% del total, pero cuentan con algo más de 51 millones de m², el 22,7% de los metros cuadrados construidos. Tomando la mediana como referencia, la tendencia en el tamaño de estos recintos no residenciales supera los 900 m² de superficie construida.

Superficie construida en los recintos no residenciales con destino industrial (m²)

El grupo de recintos no residenciales clasificados como otros usos ocupan casi 109 millones de m² (32,7%), de los cuales 85 millones corresponden a uso de almacén, 6,5 millones a depósitos, 2,5 millones a hospitales y 2,7 millones de m² a residencias.

Una vez localizados los recintos no residenciales en su punto de referencia (portal, punto de acceso), la información de todos los recintos presentes en Andalucía es agregada en celdas cuadradas de 250 metros de lado. De este modo, la información se sintetiza y se pueden estudiar los patrones de distribución territorial de los recintos no residenciales sobre el territorio andaluz.

De las 1.416.159 celdas que cubren los más de 87.000 km² del territorio andaluz, 166.286 registran al menos un recinto no residencial, lo que representa el 11,74% del total de celdas. En términos de población, el 3,7% del total de las celdas está habitado, según la distribución espacial de la población elaborada por el IECA, el 15,15% de las celdas cuentan con al menos un edificio y el 9,9 con alguna vivienda. Esto determina la segmentación territorial de los usos de los edificios y establece que la población, desde el punto de vista residencial, se concentra en zonas definidas del territorio. En este caso hay que tener en cuenta que la distribución de la población se representa según su lugar de residencia, algo así como ubicación nocturna de la población, mientras que durante el día o por temporadas la población se ubica en otros lugares por distintos motivos (trabajo, formación, ocio, vacaciones, etc.). La relación entre el espacio residencial y el espacio relacionado con otro tipo de actividades conlleva tendencias diferentes en la ocupación del territorio. Esto último es lo que se refleja principalmente con los datos obtenidos y que se presentan en esta publicación: los lugares donde la población puede realizar actividades, diferentes de la residencial.

Superficie construida en los recintos no residenciales con destino de oficina (m²)

La densidad de recintos no residenciales por celda presenta un alto rango de variación, registrándose un número elevado de celdas con baja densidad de recintos no residenciales, que en gran medida es debido al tipo de uso para el que está destinado el recinto. Así, 132.626 celdas cuentan con menos de cinco recintos no residenciales, lo que supone un 79,8% del total de celdas; de las cuales 49.445 cuentan con un solo recinto, 47,8%. Frente a esto, nos encontramos con otras celdas con presencia elevada de recintos no residenciales (61 celdas cuentan con más de 500 recintos). Estas últimas se corresponden en gran medida con zonas de fuerte densidad de oficinas, comercio o recintos con uso hotelero. La presencia de este tipo de celdas se hace más patente en zonas ocupadas por parques empresariales muy especializados con edificios en altura con un número alto de módulos de oficina de dimensiones pequeñas, sobre los 50 m² (más de 1.000 recintos con destino oficina se encuentran en una celda en el Parque Empresarial Nuevo Torneo en Sevilla). También se aprecia en zonas comerciales en los centros de los núcleos urbanos en ciudades principales o en zonas del litoral con un marcado perfil turístico. Son zonas con usos heterogéneos comerciales, hosteleros y de alojamiento.

En cuanto a la superficie que ocupan los recintos no residenciales en cada una de las celdas, la variabilidad es también amplia. Hay celdas con pocos recintos y poco extensos, de 25 a 30 m² con usos agrícolas, comerciales o almacenes. Por otro lado, en el otro extremo hay celdas que recogen la superficie de recintos no residenciales que superan los 500.000 m², que se corresponden con recintos con uso industrial, astilleros, instalaciones militares o deportivas. Son recintos no residenciales que generalmente demandan superficies extensas, lo que hace sumar un número elevado de metros cuadrados asignados a la celda donde se encuentra el punto de acceso a las instalaciones del recinto no residencial correspondiente.

Este proyecto, en definitiva muestra una imagen muy clara del territorio ocupado por la actividad económica dentro de Andalucía y las características de los recintos no residenciales que están preparados para que se lleve a cabo la actividad, fundamentalmente en cuanto a su distribución, dimensiones de los recintos y suma total de la superficie ocupada, antigüedad y uso para el que están destinados.

Para favorecer la interoperabilidad y reutilización de la información se publican los servicios de visualización WMS:

http://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/geoserver-ieca/gridcatr/wms?

Y descarga WFS:

http://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/geoserver-ieca/gridcatr/wfs?

Con la información generada, que también se puede consultar a través de un visor cartográfico y analizar con la descarga en formato de hoja de cálculo o como archivo ESRI Shapefile (.shp).

El IECA amplía con este trabajo la línea de estadística experimental orientada a la explotación de registros administrativos y la producción de información georreferenciada, aprovechando el potencial de la integración de la estadística y la cartografía.

¹No se debe, por tanto, confundir recinto no residencial ni con el concepto de local comercial, ni con el de establecimiento productivo, que hace referencia a un espacio dedicado a una actividad concreta por una empresa o unidad legal. Se busca en este proyecto identificar los espacios preparados para realizar una actividad distinta de la residencial. Espacios que estén en uso o preparados para ser utilizados con esa finalidad. Se puede consultar la nota metodológica para mayor detalle.

Esta actividad ha sido financiada con fondos FEDER